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Tras siete meses de estar en renovación la plaza principal de Barrancas de Belgrano, hoy se abre nuevamente al público con una mejor iluminación y manteniendo su antiguo diseño.

La plaza principal de Barrancas de Belgrano vuelve a estar abierta para todos los vecinos con una imagen totalmente renovada, con senderos que respetan los instaurados originalmente, bancos nuevos, más espacios verdes con mucha más variedad en vegetación, reposición de árboles y mejora en la iluminación para hacerla más moderna y eficiente.
La plaza histórica se encontraba en un deterioro total, desde la falta de verde donde solo había tierra sin nada de pasto, hasta veredas y senderos totalmente rotos por el paso del tiempo y el vandalismo. La iniciativa incluye las tres plazas que componen a Barrancas de Belgrano y, aunque las otras dos aún están cerradas al público por renovaciones, la principal ya está terminada y abierta al público en general, ubicada entre las avenidas Juramento y Vertiz Virrey y las calles Zavalía y Echeverría
Las estatuas también fueron frutos del deterioro y por eso la Coordinación de Monumentos y Obras de Arte (MOA) restauró completamente las obras. Entre las afectadas se encuentran la réplica de la Estatua de la Libertad (esculpida por Frédéric Auguste Bartholdi, el mismo que trabajó en la original), la Fuente de los Delfines y la Glorieta, también se restauró la fuente Dama del Cántaro, el mástil, los bustos y las rejas. El último en ser recuperado es el busto a Manuel Belgrano, que fue trasladado a los talleres del MOA, para su puesta en valor y finalmente devuelto a su pedestal.
A su vez, la Gerencia de Arbolado elaboró un Plan de Tratamiento y Manejo de las especies, se encargó de cada uno de los ejemplares para establecer su estado, extrayendo los que estaban secos, para replantarlos y podarlos con el fin de mejorar su situación y calidad de vida, completando la arbolada con las especies faltantes en los canteros vacíos.
Para la inauguración se hizo una plantación para fomentar el cuidado y la protección a nuestro medio ambiente, y se descubrió una placa bajo el antiguo gomero característico de la plaza. Estuvieron presentes durante el evento Rodrigo Silvosa, subsecretario de Mantenimiento del Espacio Público del Ministerio de Ambiente y Espacio Público porteño; María Inés López Lo Celso, directora de Espacios Verdes y Claudio Echeverría y Mariana Dobosz, arquitectos a cargo de la obra. Por L' Oréal, cuyas oficinas se encuentran frente a Barrancas y será quién apadrine la plaza, estuvieron Marcelo Zimet, director general y Pablo Sánchez Liste, director de Comunicación, Asuntos Públicos y Sustentabilidad.


La puesta en valor, que requirió la suma de más de 23 millones de pesos, estuvo a cargo de la Dirección General de Espacios Verdes, dependiente del Ministerio de Ambiente y Espacio Público del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Fueron siete arduos meses de trabajo para lograr recuperar la plaza principal como el arquitecto paisajista Carlos Thays la diseñó hace más de 100 años.
Para conservar la identidad del predio, los senderos se reconstruyeron con ladrillos especialmente fabricados para asemejarse a los de antaño, reponiendo además mobiliario urbano como bancos, bebederos, mesas y tachos de basuras diferenciados. Todos estos trabajos se hicieron con la clara intención de mantener el esquema original de Thays, aunque se hicieron algunos cambios como la implementación de rampas y cruces para facilitar el traslado de personas con movilidad reducida.
Los ladrillos históricos que se quitaron, se pondrán en exhibición en la plaza frente a La Glorieta para que se siga admirando su valor histórico.

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